miércoles, 29 de diciembre de 2010

El adversario es un estúpido


Decálogo de un servicio de noticias televisivo de Argentina.
 
Por el Dr. Juan de Dios Romero



1.- Todas las noticias se deben musicalizar, no importa el tema, importa llenar el vacío que la pobreza del mensaje expone.- Hay que tapar el vacío.

2.- Lo que se ve en la pantalla se debe también narrar en el audio, porque la visión no alcanza para que la gente comprenda, si por ejemplo se ve como “pasa un coche rojo por una calle”, el locutor debe decir; “pasa un coche rojo por la calle”.

3.-Cada noticia se merece la misma cantidad tiempo, el tiempo es una cosa que transcurre contra la realidad de los hechos que se mencionan en el noticiero y se utiliza para medir la simultaneidad o no de lo que sucede, si no hay simultaneidad, entonces se cuenta el tiempo que, como todos sabemos, tiene un valor mayor al de la noticia.

4.- Casi siempre el tiempo que dura la imagen de la noticia del noticiero, es menor en su duración a la medida de la extensión del tipo que habla, por lo cual, mientras el tipo habla, se repiten las mismas imágenes, y así, todo lo que sea necesario.

5.- Los noticieros de la televisión se organizan de forma tal que, luego de transcurridos, uno se acuerde más de la cara del tipo que habló que de la naturaleza del contenido de las noticias que se exponen en un orden que alguien estudió, antes- Como un minuto antes.- en el “último fin largo”, el relator decía que huían hacia lo costa como mil autos por hora; entonces se debe inferir que se escapaban 24.000 autos por día, es decir que, en una posición optimista, se trataba de la huída de 96 mil personas diarias en el estallido del verano y, teniéndose en cuanta que en Baires y otros lugares hay como 10 millones de tipos soportando todo, por lo tanto, los que se escapan son un grano de arena en el Sahara.

6.- Es adecuadamente aceptado que, cuando los tipos que hablan sean dos, mientras uno de ellos lo hace, el otro lo mire.- y nosotros veamos a los dos.- Maravillosa creación tomada de Renné Clair en su film “Puerta de Lilas”, lugar éste que está en un suburbio de París y ahora –desde hace 40 años- está lleno de monobloques para obreros socialdemócratas –luchadores- y otros que se les quieren parecer, pero nada más denso, por favor.

7.- Casi todos los noticieros tienen clarines en su audio, marchas triunfales, es como una “Aída de López” y cuando se exponen hechos criminales la música debe ser acorde a las circunstancias. Fíjese amigo, que en los buenos Films, casi no hay música de fondo, con la extraordinaria excepción de “El Tercer Hombre” y “Lo que el Viento Se Llevó”, sobre todo cuando la que se volvió loca años más tarde se come raíces y se promete el “nunca más”.

8.- Los noticieros son el monumento a Discépolo, cotidiano.- es lo mismo que se enferme el Papa que nos digan cómo está el tránsito en la Lugones (a quien le importa eso si el tipo no está manejando y viendo la televisión al mismo tiempo!!!!!).

9.- Los sábados y Domingos y los largos, el video de los noticieros es lo que se filmo el último viernes, fíjese, es así, el resto del territorio del mundo no existe para los dos que se miran noticia de por medio.- en rigor, comprar imagen de otros medios es un poco caro, ni hablar de esos canales de otros países, donde también lo estúpido tiene vigencia, por ejemplo, si usted ve a la CNN en español, ahora han puesto a montones de morochos y morochas, para que se nos parezcan; para comprobarlo vea a la CNN en inglés o a la BBC y me dará la razón.

10.- La más enorme de las catástrofes, (salvo el saqueo a un chino en el súper), no merece más tiempo que el de poner caras según se trate la noticia.

Esas caras de circunstancias se ponen en la pantalla como aprobando o desaprobando lo que se narra al menos 12 veces por día con la vigécimacuarta exposición doble de la misma imagen, quizás porque el responsable que armó todo nos cree no solo estúpidos, sino también poca cosa.

El canal cable tuvo éxito al nacer en Argentina, porque no se ponía publicidad y por eso la gente pagaba.- y esto nadie lo dice.- el periodismo es un sacerdocio decían, pero en mi opinión es un poco pederasta y por ciclos.- hasta que todo les estalle y no solo la gente mira con rencor a la corporación política, sino también a dos más, una de ellas es la de los noticieros, todos con caras olvidables.

Perdonen esta nota, no tenemos otra en estos momentos, luego la vuelvo a pasar.- y de paso repetimos la publicidad.-

Diciembre de 2010 –por suerte-

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